Transmisor de conductividad
Ideal para su uso en las industrias cervecera, alimentaria y biofarmacéutica. Los transmisores de conductividad Alfa Laval proporcionan una medición precisa y fiable de la capacidad de un líquido de proceso para transportar corrientes eléctricas.
Pantalla táctil, fácil de usar
El transmisor de conductividad dispone de una pantalla gráfica LCD integrada con 3 colores de retroiluminación diferentes. La conductividad (µS/cm o mS/cm), la concentración (%), la temperatura (°C) y también el nombre del medio específico del cliente se indican convenientemente para el control in situ para un funcionamiento seguro, especialmente para los sistemas de limpieza operados manualmente. Se configura rápidamente in situ sin ordenador mediante la pantalla táctil. Puede programarse en cuatro rangos de medición, que pueden ajustarse fácilmente desde la pantalla táctil. El control preciso de la compensación de temperatura también es posible desde la pantalla, lo que hace que el sensor de conductividad Alfa Laval sea ideal para una amplia gama de mediciones de conductividad.
Todo de acero inoxidable y PEEK, diseño higiénico
Los transmisores de conductividad Alfa Laval, de alta precisión y diseño higiénico, miden la capacidad de los líquidos de proceso para transportar corrientes eléctricas.
Todas las piezas húmedas están fabricadas en acero inoxidable AISI 316L y PEEK, y diseñadas para soportar temperaturas de proceso entre -20 y +150°C. Dado que el sensor de conductividad puede soportar altas temperaturas, es muy adecuado para su uso en procesos de limpieza in situ (CIP) y esterilización in situ (SIP). Estos sensores compactos con certificación 3A pueden instalarse en tuberías de tamaño DN40 y superior.
Alta precisión, respuesta rápida
Gracias a su geometría de flujo optimizada y a su rápido tiempo de respuesta, los transmisores de conductividad Alfa Laval son especialmente adecuados para aplicaciones que requieren la separación de medios y/o la medición de agentes de limpieza en equipos de limpieza in situ (CIP). Las mediciones son muy precisas incluso con conductividades y caudales muy bajos.
Mando a distancia, fácil de usar
El transmisor de conductividad viene con cuatro rangos de medición estándar preconfigurados, que pueden ajustarse fácilmente desde una ubicación remota. El control preciso de la compensación de temperatura también es posible desde una ubicación remota, lo que hace que el transmisor de conductividad Alfa Laval sea ideal para una amplia gama de mediciones de conductividad.
Una pantalla integrada indica los valores en mS/cm y °C, lo que proporciona instantáneamente a los usuarios los datos de supervisión y control necesarios para un funcionamiento seguro, especialmente en sistemas de limpieza operados manualmente.
Ventajas del producto
- Todo en acero inoxidable y PEEK, diseño higiénico
- Alta precisión, respuesta rápida
- Mando a distancia, fácil de usar
Catálogo de productos
Cómo funciona
Principio de funcionamiento
La medición inductiva de la conductividad se basa en el principio de un transformador. Un generador de tensión alterna controla el lado primario del transformador. El líquido fluye a través del orificio del canal en el cabezal de medición y forma un bucle conductor, que une el lado primario del transformador y el lado secundario del transformador. La célula de medición es un cuerpo homogéneo sellado todo en PEEK. A través del cuerpo hay un orificio, por el que fluye el medio. Alrededor del orificio hay dos bobinas; una bobina primaria alimentada con una tensión alterna y una bobina secundaria, que capta una pequeña señal a través de la tensión inducida por el medio. El tamaño de esta tensión depende de la conductividad del medio. Esta señal es tratada y amplificada en la electrónica hasta una señal de salida analógica lineal de 4...20 mA.
También hay un sensor Pt100 integrado en la punta del sensor. Éste mide la temperatura del medio para permitir la compensación de temperatura de la señal de conductividad, que depende en gran medida de la temperatura. La señal del sensor Pt100 también se presenta como una señal de salida analógica independiente de 4...20 mA.
Las bobinas y el sensor están encapsulados en el cuerpo del sensor de PEEK, que tiene una superficie con una rugosidad superficial (Ra) <0,8 µm. Por lo tanto, es muy adecuado para su uso en procesos higiénicos o directamente en ácidos o álcalis concentrados.